domingo, mayo 11, 2008

Los peligros de la Esperanza

¡Qué fotuqui de La Posta, eh!
¿De qué estarían hablando la Espe y Zapatero en ese instante único atrapado por La Posta? "No te sientas mal, estarán hablando de Rajoy", le podría decir el rey a Sonsoles, en referencia al enemigo máximo y común. Cosas de la política.
Madrid es una comunidad autónoma particular. Joaquín Sabina dijo alguna vez que lo que le gustaba de Madrid es que no se sintió nunca de fuera, aunque viniera de Extremadura (o algo así). Al Madrid que yo conozco siempre lo he sentido mucho más abierto a lo de afuera que cualquier otra ciudad, como si la propia identidad de Madrid sea eso: no tener una identidad cerrada. Eso mismo (o algo así) le escuché decir alguna vez al actual alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón. Cuando hacía poco que estaba yo en España viviendo, me sorprendieron unas declaraciones de Esperanza Aguirre, que no fueron muy difundidas en medios (de hecho en internet no las pude encontrar), acerca de que España debería plantearse pagarle a América algún tipo de reparación económica por todas las pérdidas que le ocasionó con su invasión y conquista. (Algunos me dirán: ¿y América no le va a pagar a España por lo que España le llevó? Yo responderé a eso que no, porque esos beneficios no fueron obtenidos a punta de armas y violencia: como dijo el director de cine brasileño Fernando Meirelles en una entrevista con nosotros, fue el genocidio más grande de la historia de la humanidad). En el plano de las declaraciones, al menos, desde Madrid, siempre gobernado por el Partido Popular desde que yo vivo en esta ciudad, tanto a nivel ciudad como a nivel comunidad, no recuerdo haber escuchado ningún tipo de expresión antiinmigrantes ni xenbófoba (algo muy diferente, por cierto, de lo que ocurre a nivel nacional con ese partido, e incluso con el Partido Socialista). Sin embargo, detrás de esa pátina de tolerancia y sentido común, se esconden otras verdades. He escuchado en alguna oportunidad al director de Público, Ignacio Escolar, en el programa 59 segundos, diciendo que Esperanza era inteligente para saber cómo respira la calle, porque es tremendamente populista (o algo así). El Partido Popular en Madrid es liberal a ultranza, tanto en su vertiente gallardonista-municipal como en la esperancista-autonómica. Ser liberal está bien, serlo a ultranza, no, como no está bien ser nada a ultranza (o al menos no en una posición política). Ser honesto no es una posición política, entiéndaseme. Además de los escándalos suscitados por las denuncias de favorecer a miembros de su familia con recalificaciones de suelo y de otras lindezas, también la Lideresa del Partido Popular de Madrid suma muchas críticas por las políticas de privatización masiva con las que está castigando a la comunidad. En el actual panorama de derechización liberal de Europa liderada por Sarkozy, Merkel y Berlusconi (¿qué pasará en Reino Unido en las próxima elecciones?) no se me ocurren más que cosas malas cuando pienso en los cambios que puede traer aparejados a España un hipotético Gobierno encabezado por la Lideresa. No otra cosa es su oposición sin vergüenza al tonto de Rajoy en el seno del PP (ella es muchas veces más listo que él) y ya hay mucha gente de su entorno haciendo campaña sin tapujos con vistas al 2012. Como ejemplo está el blog Esperanza 2012.com (contra el cual se creó el feliz pero fugaz Esperanza 2012.net) que hace trabajo de zapa a favor de la Lideresa, y adláteres como Ignacio González y Juan José Güemes repartiendo hostias a diestra y diestra (por ahora pegan dentro del PP) para que, una vez que caiga Rajoy, que va a caer (supongo y espero), asegurarse de que su jefa estará primera en la posición de largada. Por ahora, Esperanza reparte tibias alabanzas al presidente de Gobierno (dice que le tiene aprecio personal y elogió su política de nombramientos de mujeres en el gabinete ministerial), sabedora de que en España, en general, se respira un aire de hostilidad hacia la intolerancia y la radicalidad de derecha hacia la cual se ha inclinado el Partido Popular en los últimos años, y que Zapatero es por ahora un hombre con una relativa buena imagen entre los ciudadanos de voto no cautivo. Si hasta criticó a Berlusconi, hombre de muy mala fama en España, pero ultraliberal como ella. A no llamarse a engaño. Mi amiga Kim Basinger en esta entrada comenta las barbaridades que la Lideresa está haciendo con la sanidad pública, y la educadora infantil Monique en esta otra muestra su indignación ante los embates en contra de la educación universal y, también, pública, dejando claro los peligros que representa el liberalismo mal entendido que encarna esta mujer y que, indudablemente, amenazan con cargarse muchas de las conquistas sociales que España ha sabido construir. No es que uno esté a favor del funcionariado vitalicio e inoperante, porque no lo estamos (podríamos, ya que en este blog no tenemos problemas de espacio, decir que se pueden establecer muchas formas de control del funcionariado, empezando, por ejemplo, por establecer mecanismos de evaluación o de confirmación de puestos en función del desempeño realizado). Pero ya conocemos, especialmente los sudamericanos, y más especialmente los argentinos, que la liberalización a ultranza de los servicios cuyo funcionamiento deben ser garantizados por el Estado no tiene un buen final. Después no digan que no les avisamos, españoles.

5 comentarios:

el winco verbal dijo...

Mierda que salado es para ecribir mi estimado Feliciano!!.
Esto parece una obra literaria realmente, yo que no conozco a fondo estas deliberacines politicas y sociales, aprendo mucho.

Anónimo dijo...

ya veo que no descansas ni los domingos,para suerte nuestra....muy buena la foto...es una de las ventajas que debe tener vivir en Madrid,y lo mejor de la foto es ver lo bien que se llevan todos cuando no hay cámaras de por medio...nos toman el pelo como quieren.

Santitos dijo...

Felicidades por esa foto. Yo no tengo esperanza en Esperanza. Sus estrategias populistas, la sed de poder que le cuelga de la comisura de los labios y su incultura (acuérdense de los gloriosos asaltos de los hombres de negro del Gran Wyoming, aquello sí era CQC del bueno) me desasosiegan (por decirlo suave).

En cuanto a la Conquista, y sin justificar las matanzas que indiscutible e injustamente perpetraron los hombres de Diego Velázquez en adelante, creo que fue mucho más cruenta la del norte a manos de los ingleses que la de Río Bravo abajo por los españoles. Sólo hay que contar cuántos indígenas o mestizos quedan en Estados Unidos y ver, simplemente ver, los rostros de América Latina.

Por lo demás, hay vidas fascinantes dentro de esa gesta. Yo conozco por razones obvias algunas de las que estuvieron en México. Les recomiendo la Historia verdadera de la conquista de la Nueva España, de Bernal Díaz del Castillo, o los escritos de Toribio de Benavente "Motolinía" y de Fray Bernardino de Sahagún, primeros defensores de los derechos de los indígenas, traductores del náhuatl.

Ay, leyenda negra denunciada por tantos, como John Elliott. Emiliano Zapata, por ejemplo, se levantó reivindicando el derecho de los indígenas a la tierra con las Nuevas Leyes de Indias en la mano, promovidas por Fray Bartolomé de las Casas y promulgadas por Carlos V en 1542.

Francamente... ¿pedir perdón? En todo caso, los inclementes fueron sus antepasados, no los nuestros, que se quedaron en la península.

Uf, cuánto hablo.

Monique dijo...

Gracias por el hipervinculo!!!! No dejemos que sean palabras sordas!!! El futuro de los bambinos esta en juego, y con él el de toda la sociedad...

Kim Basinguer dijo...

Todos sabemos que la conquista fue más que nada un robo del patrimonio otros, y siempre nos sentiremos algo avergonzados de que eso haya sucedido, pero ninguno de los que vivimos en esta época somos culpables de ello, solo podemos aprender de los errores de otros.
Yo espero que no salga nunca Espe aunque hay mucho loco suelto...